Miopía infantil: Comportamientos a adoptar para retrasar la aparición de la miopía
¿Por qué tu hijo es miope? Aunque este problema de visión en particular no ha revelado todos sus misterios, hoy sabemos mucho más sobre los factores que pueden influir en la capacidad de tu hijo para ver a distancia. Las principales causas de la miopía están vinculadas al entorno que le rodea. Pequeños cambios pueden hacer grandes diferencias... por lo tanto, ¡es hora de considerar los comportamientos que podrían ayudar!
Frente al aumento de la miopía, la mejor protección es la clásica: alentar a tu hijo a participar en actividades al aire libre durante al menos 2 horas al día. Jugar, salir a caminar o simplemente llevar a tu hijo contigo cuando sales, todo ayuda a expandir sus horizontes.
Smartphones, tablets, ordenadores... a menudo se culpa a las nuevas tecnologías de esta condición. Sin embargo, los efectos negativos no son tanto el resultado del uso de una pantalla como el hecho de que aumenta el tiempo dedicado a las actividades de visión cercana. Y, se sabe que pasar demasiado tiempo en actividades cercanas como leer, escribir o el uso de dispositivos tecnológicos es un factor de riesgo para la miopía. En caso de visión cercana prolongada, es importante aplicar la regla 20-20-2: Después de 20 minutos de trabajo cercano, debemos alentar a los niños a mirar objetos a distancia durante al menos 20 segundos.
Otro factor a tener en cuenta es la distancia desde la que un niño lee o mira una pantalla. Es una ecuación simple: cuanto más cerca están, mayor es la demanda visual de sus ojos y más probable es que se vuelvan miopes. Por lo tanto, préstale atención durante estas actividades, para asegurarte de que tu hijo desarrolle los hábitos correctos desde el principio.
Finalmente, el último consejo es 'no dudes en acudir a un oftalmólogo para que revise regularmente la vista de tu hijo', ya que su visión puede cambiar rápidamente. Cuidar su miopía lo antes posible no solo les permite aprovechar al máximo todas las actividades, juegos, descubrimientos y aprendizajes que tienen a su disposición. También significa tratar la afección, evitar que los problemas de visión progresen y reducir los riesgos de desarrollar patologías oculares más adelante en su vida. Un oftalmólogo también podrá sugerir soluciones para controlar la miopía, en particular a través de gafas con lentes adaptadas.