AGITE LOS JUGUETES AÉREOS
Son pequeños artilugios aéreos destinados a promover el sueño. Estos juguetes se instalan por encima de la cuna del bebé. Agítelos, hágalos volar y girar.
Son momentos agradables y alegres, durante los cuales los ojos del bebé siguen esos juguetes.
LOS JUGUETES SON, SOBRE TODO, PARA ESTIMULAR AL BEBÉ
– Haga girar las pelotas
Globos de colores o pelotas de tonos brillantes atraen los ojos del bebé. Por supuesto, es demasiado pequeño para compartir el juego, pero se apreciará que sigue con los ojos la trayectoria de la pelota.
Primero, tiene que hacer girar la bola en el aire. Después, lance la pelota a su pareja para asegurarse de que el bebé pueda seguirla la mirada.
– Acaricie a los peluches
¿Qué hay más dulce y relajante que un peluche? En colores pastel, suaves o brillantes, los estos compañeros son siempre sinónimo de amor y confianza.
Los bebés adoran sin duda suavidad y calidez de sus peluches. Aproveche la oportunidad para que se interese por las formas: si se trata de un oso de peluche, muéstrele la forma de la cabeza, las pequeñas orejas redondas, su nariz, etc.
– Descubra libros con ilustraciones
Agradables y, a menudo, muy atractivos para los bebés, los libros con ilustraciones no sólo serán de interés para los padres. Abra un libro y muestre cada imagen al bebé, explicando qué contiene.
El bebé va a ser sensible con este descubrimiento visual y táctil. No dude en asociar la imagen con los colores dominantes en ella. Deje que se familiarice con este papel grueso y diviértase con el aprendizaje de su hijo gracias a las coloridas imágenes de su interior.
– Juegue con un juguete
Con el bebé, debemos tener tiempo para jugar juntos con un juguete de madera, por ejemplo. Animales, casas, coches… cualquiera es válido.
Verlo juntos, describir su forma y color. Diviértase haciendo que el bebé se mueva y, a continuación, déjelo a su alcance. El niño asociará el juguete con las formas.
– Dibuje para su bebé
No es necesario ser un artista reconocido para dibujar con su bebé. Explíquele cómo lo hace, enséñele los lápices de colores y las formas y diseños que puede hacer sobre un papel blanco.
A continuación, guíe su descubrimiento de los lápices de colores. Puede que usted no sea Goya o Velázquez, pero el bebé se sentirá como un pequeño Picasso. En cualquier caso, sus ojos se verán estimulados.
DESPIERTE SU CURIOSIDAD
Todas las situaciones se pueden utilizar como un juego para despertar la curiosidad de su hijo. Hacer juegos con las manos o los dedos, formar sombras… También puede chasquear los dedos con ritmo, cantar o escuchar música.
Él se sorprenderá al asociar la forma de sus dedos con los sonidos que pueden producir.
Todos estos momentos de diversión que comparta con el bebé se traducirán en mucha más felicidad al servicio de sus ojos y, a la vez, le permiten identificar posibles problemas de visión de su bebé de manera temprana.