COMPRUEBA TU HISTORIAL FAMILIAR

Tus genes pueden afectar a tu visión y a las probabilidad de desarrollar problemas oculares.

LA FAMILIA Y LAS ENFERMEDADES OCULARES

Los problemas visuales pueden ser hereditarios. Asegúrate de conocer bien las condiciones visuales que se dan en tu familia.

ENFERMEDADES OCULARES HEREDITARIAS

Algunas enfermedades visuales pueden tener un origen genético. En la mayoría de las ocasiones, la detección temprana es vital, por lo que es bueno conocer bien los antecedentes familiares. En una misma familia pueden darse varias condiciones oculares, algunas de las cuáles tienen más probabilidades de ocurrir que otras.

Las tres enfermedades visuales más comunes:

DMAE

La degeneración macular asociada a la edad afecta a las personas a partir de los 60 años.

La DMAE afecta a la habilidad de ver los objetos claramente, con nitidez.

Esta enfermedad no se puede curar, pero existen tratamientos que ayudan a frenar su avance. Cuanto antes sea diagnosticado, mejor será el pronóstico. Si en tu familia hay antecedentes de esta enfermedad, es fundamental que acudas a las revisiones periódicas de visión marcadas por tu óptico-optometrista.

GLAUCOMA

Esta patología aparece cuando la alta presión intraocular produce lesiones en el nervio óptico.

Entre los síntomas del glaucoma se encuentran la visión borrosa y la sensibilidad a la luz. Si no se trata a tiempo, el glaucoma puede llegar a producir visión en túnel, ofreciendo a la persona una imagen similar a la que se tiene al mirar por un largo tubo. El glaucoma puede tratarse con medicamentos y mediante tratamiento con láser.

CATARATAS

Las cataratas tienen lugar cuando el cristalino se nubla al perder su flexibilidad y transparencia. Produce visión borrosa o distorsionada.

Algunos bebés nacen con cataratas que pueden empeorar con la edad. En la mayoría de países, el médico observa los ojos del niño en el nacimiento, para descartar este tipo de anomalías. Si te preocupa la vista de tu bebé, consulta el tema al pediatra o al óptico-optometrista.